15 febrero, 2007

Resignación

Lamento que tengamos censurado por dentro tanto que ofrecer.

Perímetro

Te quiero como se quiere a un ave en libertad.
Te quiero como se quiere a un preso fuera de la cárcel.
Te quiero como se quiere a un bebé fuera del encierro.
Te quiero como se quiere a un niño corriendo sin una línea de meta.
Te quiero pero no te puedo querer así.
Y por eso, te quiero en cautiverio.


07 febrero, 2007

Choteo

Me rechazaron en mi lecho sagrado. Me quitaron las ropas tiernamente y una vez desnuda, se burlaron de mí, de mis formas, de mi desnudez. Me alumbraron con luces mironas, me señalaron y me dijeron puta. Me ignoraron cuando pedí algo con qué cubrirme. Me dieron la espalda como si fuera un pedazo de persona. Usaron mi cuerpo y en mí dejaron una marca lúgubre en mi memoria.
Ahora, cada vez que me acuesto en ese lugar, recuerdo este episodio. Recuerdo mis labios lastimados por su barba a medio afeitar. Recuerdo la timidez de mi cuerpo desprovisto de cualquier disimulo. Recuerdo lo vacía que quedé cuando se alejaron entre risas y vulgaridades. Y quedé sola de nuevo en esta alcoba, sin más consuelo que un "no volverá a pasar" que ni yo misma me lo creo.

Autosilencio

Por cada palabra que digo, me trago dos. Por cada silencio que hago, censuro una idea. Mi estómago está lleno de palabras no dichas y mi garganta está rota de tragar. A mi mente le duele los tantos pensamientos callados. Me marea la autocensura, me desequilibro entre lo que quiero decir y lo que realmente hago.
Quisiera clavarme una varilla en mi cuerpo para que salga el dolor que tengo. Quisiera lacerarme la vida para que el dolor sea más allá de la sustancia, para que sea real; y que salgan chorros de sangre para liberarme de esta linfa sucia que me pudre por dentro.
Por más que me bañe, no se me quita el olor a descompuesto. Por más que llore, no limpio mi alma. Por más que vomite, no limpio lo que he engullido. Te cambio tu pureza con la mácula de esta que no es digna de ti. Dámela a mí antes de regalársela de buenas a primeras a tu belcebú querido.