Boca cerrada

Cubrila con algo, muerde algo. Un pañuelo, una manzana.
Tragate tus palabras y no hagás ningún sonido que haga sentir remordimiento en quien te oiga.
No te luce bien esa cara de arrepentimiento, necesitás hacer mucho más que eso para sacar las dagas filosas que lanzás con precisión.
Comments