« Home | Autosilencio » | Todavía incluso » | Balanza » | Dirección » | Adiós » | Aprendiz » | Tacto » | Perfidia » | Oooh! » | Tan efímero como... »

Choteo

Me rechazaron en mi lecho sagrado. Me quitaron las ropas tiernamente y una vez desnuda, se burlaron de mí, de mis formas, de mi desnudez. Me alumbraron con luces mironas, me señalaron y me dijeron puta. Me ignoraron cuando pedí algo con qué cubrirme. Me dieron la espalda como si fuera un pedazo de persona. Usaron mi cuerpo y en mí dejaron una marca lúgubre en mi memoria.
Ahora, cada vez que me acuesto en ese lugar, recuerdo este episodio. Recuerdo mis labios lastimados por su barba a medio afeitar. Recuerdo la timidez de mi cuerpo desprovisto de cualquier disimulo. Recuerdo lo vacía que quedé cuando se alejaron entre risas y vulgaridades. Y quedé sola de nuevo en esta alcoba, sin más consuelo que un "no volverá a pasar" que ni yo misma me lo creo.

Lo que te pasó es terrible. creo que una siempre debe darse su lugar y no dejar que nadie te haga sentir menos.

Publicar un comentario